Esta singular casa de diseño, construida en 1966, se inspiró en la arquitectura normanda clásica, y ha sido decorada con exquisito gusto por sus actuales propietarios con recuerdos de todo el mundo. Hoy en día, sus múltiples tesoros incluyen puertas de pino Valsaín, inspiradas en un diseño veneciano, ricos entelados y papeles pintados a mano que evocan el verano en la campiña inglesa e impresionantes azulejos antiguos.

A pesar de este variopinto abanico de influencias decorativas, se trata de una casa luminosa y espaciosa, diseñada con el objetivo de crear una sinergia entre el interior y el exterior. En la planta baja, el recibidor, el salón, el comedor y el porche conforman un extenso y fluido núcleo central, un fantástico espacio para disfrutar de agradables veladas. También en esta planta se encuentra un aseo de invitados, una cocina bien equipada con una gran despensa, un cuarto multiusos (ideal como sala de juegos o taller de manualidades) y un dormitorio.

Una impresionante escalera de madera conduce a las habitaciones privadas que se alojan en el piso superior. Esta planta consta de cuatro dormitorios amplios (uno en suite) y dos baños adicionales. Todas las habitaciones cuentan con armarios empotrados, grandes ventanas abuhardilladas y unas vistas excepcionales.

Esta singular casa de diseño abarca 4 hectáreas de jardines exuberantes y bien cuidados, que ofrecen todos los ingredientes necesarios para disfrutar de un relajante fin de semana familiar: piscina, pista de pádel, vestuarios, sala de ping pong y aparcamiento cubierto para varios coches. La propiedad dispone también de un edificio auxiliar de 110 m2, que en el pasado fue la casa de guardés y necesita algunas reformas. Está compuesto por dos habitaciones, un baño y cocina, y sería ideal para una casa de invitados independiente o un estudio/taller.